España vaciada: secretos para unos pocos

La Voz

VIAJES ESPAÑA

31 mar 2022 . Actualizado a las 11:34 h.

En la década de los 70, España comenzó a vaciarse. Muchos pueblos vieron marchar a familias enteras que buscaban su futuro en la industrialización de las ciudades. Con el transcurrir de los años, este proceso de despoblación se intensificó hasta desembocar en un fenómeno denominado España vaciada. No obstante, y sobre todo a raíz de la situación creada con el Covid-19, son muchas las personas que han cambiado su visión y han apostado por sustituir el paisaje urbanita por entornos rurales, desde los que teletrabajar o poder disfrutar de unas excelentes vacaciones. Y es que no es de extrañar, ya que viajar a la España vaciada constituye una gran oportunidad para conocer espacios naturales, culturas y personas que todavía no han sufrido la masificación del turismo. Un entorno para perderse y olvidarse de los problemas de la rutina diaria que incluye rutas de senderimo en las que descubrir nuevos parajes y muestras del vasto patrimonio cultural español. Maravillosas rutas que consiguen que el viajero se sienta como si llevara todo un territorio en la mochila.

Para que vayas tomando nota, a continuación te mostramos algunos de sus más valiosos tesoros. ¡Acompáñanos! 

Tres municipios de la España vaciada que no puedes perderte 

Plantearte como destino para tus escapadas o tus estancias vacacionales alguno de los preciosos pueblos de la llamada España vaciada es una apuesta segura con la que sin ninguna duda acertarás. 

Balboa

En León encontramos Balboa, un municipio con menos de 300 habitantes de habla gallega. Aunque su patrimonio es amplio para un pueblo tan pequeño (cuenta con un castillo fechado en el siglo XIV y una iglesia de estilo renancentista), destaca especialmente por su arquitectura tradicional: las conocidas como "pallozas", viviendas de plata circular u ovalada, de unos 20 metros cuadrados, cubiertas por un techo bajo de tejado cónico hecho a partir de tallos de centeno rematados en forma de pico.

Brihuega

Este municipio de Guadalajara es algo más extenso que Balboa. Sus 2.400 habitantes están bien próximos a la capital y aunque su patrimonio arquitectónico pasa por múltiples iglesias, si destaca por algo es por sus campos de lavanda, de los que se extrae las esencias de los diversos perfumes. En concreto, Brihuega produce una décima parte de toda la lavanda mundial, la misma de la que se derivan colonias, pero también ambientadores.

Bandujo

Bandujo (Asturias) se erige frente a un telón de fondo a base de montañas, sobre las que se construyen sus casas de origen medieval y entre las cuales destaca una torre defensiva que data del siglo XIV. En la actualidad viven apenas 40 personas y el número de viviendas no supera las 60. El pueblo al completo está declarado como Bien de Interés Cultural. Aparte de la torre, cuenta con su propia iglesia (Iglesia de Santa María, del siglo X) y el Palacio. Es sorprendente observar cómo esta aldea se divide en apenas siete barrios. Como curiosidad, las tumbas de su cementerio se cubren de tierra con flores por encima dispuestas en motivos ornamentales por el día de Todos los Santos.Como puedes observar, "puebleando", obtendrás un montón de beneficios, aumentando tu cultura. ¡Y por aquello de que no solo de cultura vive el hombre! podrás descubrir además, nuevas rutas que te sorprenderán deleitándote con sus extraordinarios paisajes o degustar su exquisita y variada gastronomía con productos cultivados en la huerta. Realmente, son muchos los motivos por los que perderte entre la gran pluralidad de rutas que ofrece la España vaciada. Veamos algunos de ellos.

Cuatro indiscutibles razones para pueblear por la España vaciada

  1. Es innegable que visitar un pueblo tiene muchas ventajas. Paseando por las calles de algunos de los pueblos de esta extraordinaria y sorprendente España, tendrás la sensación de que estás solo en medio de un paraíso. Cambiarás las calles llenas de gente de la ciudad por rincones llenos de encanto. ¡Di adiós a la masificación!
  2. Por otra parte, y en línea con el punto anterior, desconectarás, desconectarás y desconectarás del frenético ritmo de vida que nos marca esta era de las prisas por la que todos caminamos. Te olvidarás del tiempo, de los atascos y del bullicio de las grandes ciudades. ¡Despídete del reloj!
  3. En cuanto a la proximidad de sus gentes. Solo comentarte que son personas realmente cálidas, cercanas y muy acogedoras, que viven bajo el ritmo que marca la benevolencia de la naturaleza, sin estrés, cuidando esos pequeños detalles que hacen la vida diferente y que invitará a todo el que por allí se digne pasar, a formar parte íntegra de sus costumbres y de sus vidas. 
  4. Otro aspecto bastante interesante a tener en cuenta es que vacacionear por estos entornos rurales resulta muy favorecedor para tu economía. Tanto la bebida como la comida, por no hablar de los alojamientos, son mucho más baratos que en otros puntos turísticos, sin comprometer la calidad por ello. ¡Tu bolsillo te lo agradecerá!

En definitiva, visitar un pueblo de la España vacía es una experiencia única, diseñada prácticamente a tu medida.

¿A qué esperas para descubrirlo?