No es fácil llegar a este lugar apartado de la provincia de Lugo, pero sirve de entrada a un paraje único en Os Ancares, donde se encuentran las hayas más occidentales del sur de Europa y una estatua de San Francisco con historia
25 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.A pocos kilómetros del nacimiento del río Eo, y a los pies de la majestuosa Serra da Marronda, Baleira ofrece un área recreativa singular, alejada del mundanal ruido. Un molino, un hórreo, cortines (cercados de piedra donde se colocan las colmenas para que no lleguen los osos), puentes, merenderos y miradores, uno de los cuales está coronado por la estatua de San Francisco de Asís, patrón de la naturaleza, son algunas de las señas de identidad de A Cortevella.
La talla de este santo italiano, que prefirió la pobreza a la opulencia como forma de vida, sobrevoló en helicóptero A Marronda en el 2010 para ser emplazada al final de un centenar de escalones. La figura de Asís y su base, de 830 kilos de peso, así como su colocación, fueron sufragadas por un grupo de emigrantes gallegos de éxito en Cataluña, que no dudaron en manifestar así su apoyo a la Asociación de Amigos da Marronda.
No es fácil llegar hasta este apartado punto de la provincia de Lugo, situado en la comarca de A Fonsagrada, formando parte uno de los bosques de mayor relevancia de la reserva de Os Ancares. Al área recreativa de A Cortevella solo se llega si se busca. Y eso es lo mejor de todo. Se hace a través de la N-640 que une Lugo y Ribadeo, para luego tomar la LU-760 a la altura de Veigas do Couso, la LU-750 en Rixoán y, finalmente, la LU-P 5041 tras pasar la Capela de San Pedro. A Cortevella está situada en la Fraga da Marronda, un lugar privilegiado en el que se sitúan las hayas más occidentales del sur de Europa, acompañando flora autóctona como carballos, castaños o acebos. Los otoños son preciosos. De postal.
Los amantes del senderismo tienen en este lugar un punto de partida perfecto para una de las rutas más bellas de Galicia, la llamada PR-G 145, Ruta da Marrona-Alto Eo. Es circular, de 22 kilómetros y muy exigente físicamente. Desde A Cortevella hay que subir hasta los 923 metros a través de una fuerte pendiente que, una vez arriba, permite unas grandes vistas de todo el valle del Eo. La vuelta se realiza por el propio río, con continuas subidas y bajadas que ponen a prueba las piernas del visitante.
Senderismo
La PR-G 145, circular, de 22 kilómetros, permite recorrer la Serra de Marronda desde A Cortevella.
Arte
Hay «cortines», que antes escondían las colmenas de los osos, un molino y un hórreo de montaña.