El turismo nacional que busca alternativas al Mediterráneo se afianza en la comunidad
22 ago 2018 . Actualizado a las 13:35 h.Galicia tiene gancho y el cambio climático puede dispararlo. El potencial de la comunidad como destino turístico se afianza. Aquí no se baten las cifras astronómicas del Mediterráneo, pero, poco a poco, el número de visitantes procedentes de la Península va creciendo. «Estase a producir lentamente un cambio de ciclo», asegura Rubén Lois González, catedrático de Análise Xeográfico Rexional en la Universidade de Santiago (USC).
Los datos que maneja Turismo de Galicia, organismo dependiente de la Xunta, apuntan en esta dirección. Las cifras de pernoctaciones marcaron un máximo histórico el pasado año. Más de cinco millones de viajeros. El 71,3 % fueron turistas nacionales. Madrid, Castilla y León, Andalucía y Cataluña son las comunidades que más viajeros aportan. «Levamos sete veráns nos que só recibimos turistas de fóra de Galicia», apunta Nuria Sánchez, responsable del establecimiento de turismo rural Casa das Xacias, en Chantada.
Alquilan el inmueble entero. «Todos os que veñen son de Madrid para abaixo. Albacete, Andalucía, Estremadura, Valencia... ou ata das Baleares. Alugan por temporadas longas, o mínimo acostuman ser dúas semanas», añade Nuria. La familia que está ahora en la casa es de Murcia. Reservaron tres semanas. «Huimos del calor infernal de Murcia, cada año a un sitio del norte de España. Esta es la primera vez en Galicia», cuenta Nedea González. Con ella se vinieron su marido, los hijos y los suegros. «Disfrutamos de vuestro clima y de vuestro verdor, es impresionante», confiesa Nedea. La casa también tiene huerto y jardín que cuidan durante su estancia. «La playa allí es un horror. Tan llena de gente. Eso no son vacaciones», insiste.
Los motivos
La masificación del Levante está empezando a agotar su tirón. «O turista español tende, cada vez máis, a escapar de lugares repletos de xente e con temperaturas extremadamente altas. Pouco a pouco, estanse a achegar ao noroeste», incide Rubén Lois. «El turismo en Galicia es multimotivacacional. Quieren gozar de nuestra costa, que no es lo mismo que achicharrarse al sol en una toalla», añade María Luisa del Río Araújo, coordinadora en la USC del máster en Dirección e Planificación de Turismo.
El paisaje, el clima y la autenticidad de los pueblos del litoral son para ella el imán y, al mismo tiempo, la tabla de salvación. «El tiempo nos protege de que se repita aquí el modelo mediterráneo», justifica. «Somos menos fráxiles grazas a iso», coincide el catedrático de Análise Xeográfico Rexional.
Un litoral con 1.500 kilómetros de costa, bosques, montaña, ríos... El entorno natural es la cualidad que más valoran de Galicia los turistas, según las encuestas que maneja Turismo. El 42,5 % apuntan al paisaje cuando le preguntan por los motivos que lo traen hasta esta esquina del noroeste. También lo ven así los gallegos (el 25% de los turistas nacionales que pernoctan en la comunidad) y los extranjeros, el 28% de los que se acercaron aquí el pasado año (un 30 % más que en el 2016). La enogastronomía y la tranquilidad son, respectivamente, la segunda y la tercera motivación elegidas.
Interés repartido
Aunque las Rías Baixas son el principal motor turístico junto a Santiago -la ría de Arousa es el segundo geodestino más demandado por detrás de Compostela-, puntos como Os Ancares, O Courel, Deza, Costa da Morte o Muros están experimentando una evolución al alza. Una deslocalización positiva si lo que prima es conservar los atractivos por los que Galicia gusta y puede seguir convenciendo en el futuro. «No se trata de convertirnos en un resort, sino de mantenernos genuinos», concluye María Luisa del Río.
Las claves
1. PAISAJE
Es la principal motivación que arrastra a los turistas a Galicia. Los paisajes y la naturaleza, según respondieron el 42,5 % de los encuestados para un estudio de Turismo de Galicia.
2. COMODIDAD
La gastronomía y el enoturismo también son un imán de atracción. Son la segunda razón, las del 25,8 % de los encuestados. Muy de cerca le siguen la tranquilidad y el descanso. Es lo que anteponen el 24,9 % de nuestros visitantes.
3. TIEMPO
La temporada estival supone el 37,7 % de la demanda turística. Sobre todo, en las localidades costeras. El resto de viajeros vienen en temporada media y baja. El sol y la playa importan, pero no son el único encanto de la comunidad. Un reto a conseguir es una mayor desestacionalización.