La Argentina oculta: 15 lugares que desconocías

Desde la provincia de Salta hasta Tierra del Fuego, una guía para visitar lugares no tan turísticos pero que deberías conocer


Uno de los destinos elegidos por los turistas que deciden viajar a Sudamérica es Argentina, el país de la carne, el tango, el fútbol y el mate. Convirtiéndose en el quinto país más visitado de Latinoamérica, después de México, Brasil, República Dominicana y Chile. No existe una estación ideal para conocerla porque presenta toda la gama de climas que van de cálido seco a frío de montaña. Asimismo, el territorio argentino se extiende desde las más elevadas cumbres de los Andes en el oeste hacia los grandes ríos y las extensas playas y acantilados del mar Argentino en el este; desde la selva tropical de las Yungas al norte hasta los valles, glaciares, lagos y bosques fríos de la Patagonia Andina en el sur hasta la Antártida.

1 Valle de Marte, Jujuy

A más de 4.000 metros sobre el nivel del mar, en un rincón de la Puna Jujeña, está el Valle de Marte conocido así porque en él abundan formas de colores rojos y grises. Esta curiosa postal de tipo lunar cogió trascendencia cuando pasó a tener reconocimiento internacional la emblemática Ruta Nacional 40, una carretera de 5300 kilómetros, que une el cabo Vírgenes en Santa Cruz (situado al oriente del Estrecho de Magallanes), hasta la ciudad de La Quiaca (Jujuy), sobre el límite con Bolivia, en un recorrido general paralelo a la Cordillera de los Andes.

Además, para llegar desconocido lugar es necesario resistirse a la falta de oxígeno, ya que la Puna impone severas restricciones, y es este uno de los grandes motivos por los cuales no todos los turistas llegan hasta este lugar. Otra de las condiciones es quedarse por la tarde porque la intensidad de los colores aumenta que en horas de la mañana.

2 San Isidro de Iruya, Salta

Con 150 habitantes, ubicado a ocho kilómetros de Iruya, el pueblo de San Isidro es uno de los más pequeños y la única manera de llegar es caminando y bordeando un río. Una caminata de aproximadamente dos o tres horas que vale la pena para encontrarse con un paisaje solitario, donde los verdes contrastan con los colores secos de las montañas y su suelo rojizo.

El pueblo de San Isidro es muy pintoresco y lo atractivo es que está aislado, queda a unos 25 metros de altura del lecho del río, en las casas de lugareños se puede dormir, comer y comprar artesanías regionales.

 

 

3 Bañado La Estrella, Formosa

Está considerado el tercer humedal más importante de América, después del Pantanal de Brasil y los Esteros del Iberá. Ubicado en la provincia de Formosa, un mundo semiacuático que crea un paisaje irreal con troncos cubiertos de enredaderas junto a lobitos de río, yacarés, vizcachas, carpinchos, serpientes, osos hormigueros, cocodrilos, garzas, cigüeñas, jabirúes y aguará guazú. Es un lugar ideal para los amantes de las aves.

Los bosques están clasificados en bajo y alto, el primero posee algarrobos, quebrachos colorados y blancos, mistoles, guayacán y palo santo, y los segundos por sacha sandia, chañar, vinal y palo mataco. Muchos de estos árboles cuando están muertos y semisumergidos casi siempre están cubiertos de musgos y algas.

Además, el Bañado de La Estrella fue declarado reserva natural provincial en el 2005.

4 Campo del Cielo, Chaco

Una extensa región de Argentina ubicada en el Chaco Austral, entre las provincias de Santiago del Estero y Santa Fe. Campo del cielo es el nombre que le pusieron los aborígenes tras una «lluvia» de meteoritos acaecida hace unos 4000 años. Este acontecimiento dejó una zona de impacto de unos 15 kilómetros de ancho por 70 de largo y no existe otro lugar equivalente. 

Además, Campo del Cielo es un parque científico y educativo, un museo al aire libre donde se pueden observar los meteoritos más grandes de la historia.

5 La Ciudacita,Tucumán

A 4.400 metros sobre el nivel del mar se encuentran las ruinas del único bastión incaico en Tucumán. Estas extraordinarias ruinas incas construidas con piedra laja gris consisten en recintos escalonados sobre el filo de la montaña a partir de un campo de 40 por 60 metros llamado Kalasasaya. El paisaje impresiona en parte por su tamaño y también, por la calidad detallada del trabajo realizado con las lajas de piedra. Este sitio junto con el Camino del Inca ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

6 Teyú Cuaré, Misiones

A 70 kilómetros de Posadas, en la provincia de Misiones se encuentra el Parque Provincial Teyú Cuaré, el cual fue fundado en 1969 para proteger la naturaleza de la flora ya que numerosos investigadores y coleccionistas han visitado sus pastizales y peñones. Su nombre proviene del peñón de Teyú Cuaré que significa «cueva de lagarto» en lengua guaraní.

Por otro lado, en este parque se pueden transitar dos senderos en zig-zag, uno que llega hasta la supuesta casa del oficial nazi Martin Bormann y el segundo alcanza la cima del Peñón, donde se observan unas vistas panorámicas del lugar.

7 Campo de Piedra Pómez, Catamarca

Con más de 5 mil formaciones rocosas en un área de 25 km de largo, es sin dudas una de las maravillas naturales que ha sido testimonio de la intensa actividad volcánica de los Andes hace millones de años atrás. Se encuentra ubicado a 63 km de Antofagasta de la Sierra, a 10 de la localidad de El Peñón y a 220 de Belén, en Catamarca.

Para llegar a este campo de piedras blancas hay que atravesar el asfalto hasta El Peñón, el cual está rodeado de lagunas con flamencos, vicuñas y los volcanes más altos del mundo. Sin embargo, es recomendable contratar las excursiones que cuentan con guías experimentados con camionetas 4x4, por recorridos que andan siempre a alturas de entre 3.000 y poco más de 4.000 metros.

8 El Cañón del Talampaya, La Rioja

 

Un paisaje con paredones rojizos de 150 metros de alto con diversas geoformas y magnificas manifestaciones rupestres llamadas petroglifos. Es uno de los atractivos turísticos más importantes e impactantes del Parque Nacional Talampaya, tras la formación del cordón cordillerano acontecido hace 60 millones de años, dejó al descubierto este curioso relieve constituido por arcillas y areniscas compactadas con una visible presencia de óxido de hierro que es lo que determina el color de estos paredones.

Este lugar transmite tranquilidad a todas horas y por la tarde cuando cae el sol aparece el juego de luces y sombras sobre las tierras rojizas que se producen mientras se recorre este inmenso territorio.

9 La Cumbrecita, Córdoba

Un pequeño pueblo ubicado en el Valle de Calamuchita en las Sierras Grandes de la Provincia de Córdoba que es completamente peatonal y que busca ser un modelo replicado en otras partes del mundo donde hay mucho tránsito. En este pueblo casi todo es renovable como el agua que es reutilizada. A este escenario se le suma un paisaje sereno junto con las sierras.

Además, en La Cumbrecita viven un poco más de 1.000 personas, y la mayoría de los ciudadanos son descendientes de alemanes, suizos, franceses y austriacos, ya que durante la Segunda Guerra Mundial muchas familias europeas buscaron el exilio en tierras argentinas y fueron los que fundaron este pueblo alpino que parece de otro país y de otra época.

10 La Payunia, Mendoza

La mayoría de los turistas que viajan a Mendonza no llegan hasta La Payunia, una estancia con más de 800 volcanes, lo que la convierte una de las zonas con más concentración volcánica del planeta, contando en promedio con 10,6 volcanes cada 100 km2. También, muy cerca se encuentra el Campo de Bombas, un terreno lleno de esferas de todos los tamaños. Se trata de trozos de lava que, aparentemente, salieron volando de los cráteres en su explosión, y conservaron su forma esférica una vez frías.

Si bien los volcanes no tienen nombre, hay algunos que son los más conocidos como: Payún Liso, por ser el más elevado, contando con 3680 metros y, además tiene una forma cónica homogénea, por lo que es el más parecido a la representación usual de los volcanes. Otro volcán importante para conocer es el Volcán Payún Matrú, casi de la misma altura, que posee una caldera de nueve kilómetros de diámetro. El Volcán Morado al no tener filo en su borde, se puede caminar a través del cráter. Por su parte, el Volcán Malacara tiene la particularidad de ser de origen hidromagmático, es decir, fue formado por la erupción de agua, que formó pasadizos y cárcavas muy altas que se pueden recorrer a pie.

11 El Rosedal, Buenos Aires

Aquellos que viajan por primera vez a Argentina, lo primero que hacen es ir a visitar el Obelisco, La Casa Rosada, Caminito, Puerto Madero, Avenida Corrientes, La Boca y San Telmo, pero lo que la mayoria no visita es El Rosedal, en el barrio de Palermo. Se trata de un gran parque verde con lagos artificiales y rosedales que sorprende entre tanto cemento. Este parque fue diseñado por el paisajista Carlos Thays y tiene diversos tipos de rosas que brindan una mezcla de colores y aromas.

Su perímetro está marcado por una reja de hierro forjado. Tiene un enorme lago con embarcadero, senderos que invitan a disfrutar de la caminata al sol y el aire puro, bustos de prestigiosos escritores, fuentes y bancos para descansar. Aunque se puede visitar durante todo el año, se recomienda ir en primavera (septiembre a diciembre) para aprovechar de las plantas y además es la época donde los patos y cisnes se mezclan caminando con la gente.

También, hay un sitio ideal para los que van en pareja ya que pueden sentarse a tomar el aire en el El Puente Blanco o de los Enamorados, este lugar es elegido por los novios que mediante un ritual buscan proteger su amor. Según cuenta la leyenda, los enamorados deben tomarse de la mano, pisar el primer escalón y ambos con el pie derecho detenerse a la mitad y darse un beso.

12 Villa La Angostura, Neuquén

Rodeada de lagos, bosques y montañas se encuentra Viila La Angostira a 70 kilometros de Bariloche y es considerada una de las localidades más bonitas de la Patagonia cordillerana. Enclavada en el sector norte del parque nacional Nahuel Huapi y a pocos kilómetros se encuentra el paso fronterizo con Chile, Cardenal Samoré, y junto a otras localidades cercanas, como San Carlos de Bariloche y San Martín de los Andes conforman un corredor turístico de gran popularidad tanto en la época estival como en la invernal. En este territorio se instalaron los primeros colonos, con un gran aporte de chilenos y europeos, quienes han tenido una gran influencia en diversos aspectos, tales como la arquitectura, las comidas y las costumbres.

13 Península Valdés, Chubut

La península ha sido declarada por la Unesco como «Patrimonio de la Humanidad» ya que muchas de las especies que habitan están en peligro de extinsión, la cual está conformada por dos golfos: el golfo San José y el golfo Nuevo. En el primero se ubica la isla de Los Pájaros, llamado así por albergar todas las especies de aves australes. El otro golfo es ideal para bucear, debido a sus aguas profundas y tranquilas. En el centro de éste golfo se encuentra la ciudad de Puerto Madryn, núcleo portuario y turístico de la provincia. Asimismo, uno de los atractivos del lugar son las temporadas de las orcas que salen del mar, por eso, es recomendable viajar en los meses de marzo y abril en Punta Norte o, entre octubre y noviembre en Caleta Valdés.

14 El Chaltén, Santa Cruz

La naturaleza en su estado más puro entre valles y montañas, se encuentra El Chaltén un paraíso que en su gran mayoría continúa siendo virgen. Caminar por los bosques y escuchar los diferentes sonidos de las aves, que casi siempre están más ocultas que visibles. Todo lo contrario a lo que puedas imaginar de las grandes ciudades es este lugar que se encuentra en el sur de la Argentina y que limita con la cordillera de los Andes, en el extremo sudoeste de la Patagonia argentina, al pie del cerro Fitz Roy y a orillas del Río de las Vueltas.

 El nombre Chaltén proviene de la lengua tehuelche y significa "montaña humeante", debido a las nubes que casi constantemente coronan su cima, lo que unido a la denominación ancestral ha llevado a creer erróneamente que se trataba de un volcán. Por otro lado, a diferencia de otras montañas esta es considerada sagrada para los indígenas locales y forma parte de su cosmogonía.

 

15 Laguna Esmeralda, Tierra del Fuego

Su nombre describe el lugar junto con los bosques, montañas y glaciar que rodean a esta laguna de agua cristalina de Tierra del Fuego. Ubicada en el Valle Tierra Mayor, junto al cerro Bonete en la Sierra Alvear, a solo 20 km de Ushuaia. Los paisajes son los protagonistas y tienen un rasgo distintivo que se puede extender a gran parte de Patagonia: las montañas del cordón andino y el juego de reflejo contra el agua hacen que el lugar sea único en el mundo. Además, la erosión del agua y glaciares modelaron lagos y valles a veces cubiertos de bosques, y gran parte del año por nieve.

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