Qué ver en Betanzos, la Ciudad de los Caballeros

En un altozano sobre los ríos Mendo y Mandeo, se encuentra la ciudad de Betanzos, una de las más bellas de la provincia de A Coruña. La que fue una de las capitales del Antiguo Reino de Galicia es conocida como Betanzos de Os Cabaleiros o la Ciudad de los Caballeros por los importantes linajes que la habitaban durante la Edad Media, época histórica que ha quedado impregnada en cada una de sus piedras.

Hoy os recomendamos qué visitar en esta capital de As Mariñas. Ya sea en cualquier época del año, durante sus fiestas patronales o acudiendo a su siempre recomendable Feira Franca, que se celebra cada mes de julio, estos son los lugares imprescindibles que ver en Betanzos.

Plaza Hermanos García Naveira

En la plaza de los Hermanos García Naveira, dedicada a dos benefactores de la ciudad, estaremos en el epicentro de la villa. Alrededor de ella, podrás ver el edifico Archivo-Liceo, el Hospital de San Antonio, la Casa de Don Juan García Naveira, el Colegio de Huérfanas y dos esculturas emblemáticas: la estatua de los Hermanos García Naveiray la Fuente de Diana Cazadora. Esta última es una copia de la escultura «Diana de Versalles» expuesta en el Museo del Louvre (París). El edificio más importante de esta plaza es, sin duda, la iglesia de Santo Domingo, sede del Museo das Mariñas.

Durante las fiestas de San Roque, cada 16 agosto, en este lugar se eleva el globo de papel más grande del mundo: el Globo de San Roque, en honor al patrón de la ciudad, una tradición que se remonta a principios del siglo XIX.

Ponte Vella

Si descemos por las callejuelas hacia el río, nos encontraremos el Convento de las Agustinas Recoletas, construido entre los siglos XVII y XVIII. Destacan en su fachada el escudo de Carlos V y el escudo de la ciudad. Unos metros más adelante, la Ponte Vella (Puente Viejo), punto de entrada de los peregrinos que van hacia Santiago de Compostela recorriendo el Camino Inglés, se eleva sobre el Mandeo. Justo en este punto se inicia el Paseo Fluvial dos Caneiros, una recomendable ruta de senderismo de 3,5 kilómetros y baja dificultad que podemos tener en cuenta para cualquier momento de ocio.

Puertas de la villa

De la muralla medieval de Betanzos se pueden cruzar todavía algunas de sus puertas. De hecho, es una de las ciudades de Galicia que conserva un mayor número de ellas, como son la Puerta del Puente Nuevo, Puerta del Cristo y Puerta del Puente Viejo. En lo que respecta a la Porta da Vila, hoy en día desaparecida, son visibles en su ubicación sus tres escudos: el del Reino de Castillla, el de Betanzos y el de Galicia.

Vale la pena atravesarlas y perderse por sus callejuelas. Además, si se nos abre el apetito, detenernos en alguno de sus mesones o restaurantes para degustar la famosa tortilla de Betanzos será un plan perfecto.

Plaza de Fernán Pérez de Andrade

Si la plaza de los Hermanos García Naveira es el centro neurálgico de Betanzos, la plaza de Fernán Pérez de Andrade es el punto más emblemático de la Ciudad de los Caballeros. Aquí se encuentran la iglesia de San Francisco, que alberga destacados sepulcros de nobles medievales, incluido el impresionante sarcófago de Fernán Pérez de Andrade, y la hermosa iglesia de Santa María de Azogue. Esta última atesora el único calendario agrícola medieval completo de Galicia, situado en uno de los capiteles de la capilla sur.

Frente a los templos se suceden coloridos y balconados edificios de arquitectura popular. Y desde aquí, además, podremos contemplar una hermosa vista en la que distinguiremos el Santuario de Nuestra Señora Del Camino.

Plaza de la Constitución

Otro de los puntos imprescindibles que recorrer en Betanzos es la plaza de la Constitución. En este bello rincón de la ciudad podrás ver el neoclásico edificio del Concello, la iglesia de Santiago, y los pazos de Bendaña, Lanzós y Taboada. Junto a todos ellos, también destaca una construcción de principios del siglo XX: la modernista Casa Núñez, que en la actualidad acoge a la institución sin ánimo de lucro Fundación Centro Internacional de la Estampa Contemporánea (CIEC).

Parque del Pasatiempo

A unos quince minutos a pie desde la plaza de la Constitución,  se encuentra uno de esos lugares fascinantes cuyo recuerdo queda impreso para siempre en la memoria: el Parque do Pasatempo (Parque del Pasatiempo).

La historia del primer parque temático de Occidente se remonta a finales del siglo XIX, cuando el empresario y filántropo Juan García Naveira, lo diseñó y costeó su construcción. Este emigrante retornado, después de haber hecho fortuna en Argentina, pretendía crear un parque enciclopédico que compaginara lo lúdico con lo pedágogico. Además de ello, al contratar mano de obra de la villa, contribuía a la creación de empleo y a la mejora del entorno. Las obras continuaron hasta 1914, y en 1920 su fama era tal que aparecía en las guías de viajes, en las que se recomendaba su parada tanto a turistas como a peregrinos. Desde 1986, el parque es propiedad del ayuntamiento.